Y aun sabiéndome mujer,
zarpe por mares y ríos
Camine sin luz ni respiro,
en pos de mis sentidos
Salte altos cercos,
y rodee hermosos prados
Luche contra el viento,
el hambre y el frío
Amamante a mis hijos,
y los entregue al mundo
Como tributo a la vida,
y respeto al destino
Llore de infortunio,
entre cortinas de humo,
Mientras el mundo dormía,
yo regaba con mis manos
las horas marchitas
Fui mujer, madre e hija
engendre vida y fui querida
y en la soledad de mis días,
sacudo la frente
dándole gracias a la vida
Ana Barroso Molina
Versos de mujer y madre son la esencia que rezuma en tus letras.
ResponderEliminarUn abrazo en la tarde.